By : @mykatiuska_
Relatos de una noche de invierno.
Hoy me desperté más temprano de lo normal, el ruido de la lluvia y el canto de los pájaros me molestaba. El techo era mi cielo y lo sentía pesado. Levantarme fue una lucha, ducharme fue una guerra y vestirme fue desesperante. Todas aquellas sensaciones de desdicha vienen de ayer.
Ayer en la noche tenía una cita con amigos en un restaurante, nos dimos cita como a las seis de la tarde porque queríamos comer juntos, queríamos comer en un restaurante juntos. El día estaba triste y las calles llenas de carros, el cielo bailaba entre un gris y un azul y un blanco incomprensible y mi alma seguía ese cielo incontrolable, de pronto el sol aparecía y yo sonreía, de pronto se escondía y yo me entristecía, de pronto nevaba y yo sonreía, de pronto llovía y yo hacía extensión a la lluvia con mis lágrimas.
En todo caso ayer fue un día incompleto, triste y sombrío. Acepté ir a esta cita porque mis amigos querían presentarme a alguien.
Llegué al restaurante y ví a través de la ventana las mesas vacías. Esta vez no sólo llegué a la hora sino mucho antes de la hora. Entré y me senté en aquel restaurante llamado las chicas del tranvía.
El restaurante estaba iluminado tenue con una luz amarilla que anunciaba la llegada temprana de la noche. Llegaron mis amigos y trajeron con el a un amigo que querían presentarme. El hombre llamado D era alto, corpulencia mediana, ojos negros, cabello corto, vestido con un suéter de rayas, un pantalón y zapatos deportivos.
Los cuatro nos sentamos en la mesa, yo lancé una conversación sobre el fútbol, hace algunos meses comencé a hacer fútbol y la verdad es que reconozco algo en éste deporte, jugar fútbol te permite no pensar en nada, vas detrás de la pelota como sí tu cerebro se hubiera quedando con una cerveza en casa. D retomó la conversación y nos explicó cómo el era un gran deportista, entrenador y kinesiterapeuta. Todos estábamos impresionados de su currículum. La conversación se desarrollaba con mucha facilidad, los cuatros reíamos, comíamos y la estábamos pasando bien.
Mi amiga y su esposo se tenían que ir, nos dejaron a D y a mí tomando los últimos tragos juntos
Mi amiga y su esposo se tenían que ir, nos dejaron a D y a mí tomando los últimos tragos juntos. Conversando de todo y de nada, no me acuerdo por cuál puerta llegamos a la conversación sobre los derechos de las mujeres.
Para el rescatar una relación significaba mentir. Es decir que cuando su novia no quería dejarlo ver a sus amigas, él se inventaba situaciones diferentes para poder hacerlo. Continúo diciendo que el era muy buen mentiroso porque podía obtener la cuartada perfecta.
Hasta ahora todo va normal… Yo ya estaba terminando mi enorme vaso de cerveza.
Luego le pregunté. ¿Cuánto tiempo tienes separado? Bueno, cuatro meses pero la verdad es que estoy muy feliz sin ella. Cuando la conocí ella era joven y no había tenido mucha experiencia, yo me convertí, dijo D, en su pilar principal, yo sentía que era mi presencia la única cosa que podía hacerla feliz y yo no me sentía muy cómodo con esa visión de la pareja, pues yo quería seguir teniendo amigos y tenía la necesidad de liberarme de ese peso enorme que ella significaba.
Terminando el último trago le digo, cuánto lo siento, a lo que el responde y ¿tu?
Yo con un laberinto en la montaña y una cascada al final que estaba situada después de un abismo explique en breve mi situación diciendo: A veces hay limites que no debemos pasar. No sé porque al chico se le metió en la cabeza las ganas de escuchar una versión completa y más larga, yo rechacé de dar más explicaciones o de ser concreta. ‘
En un silencio todo se transforma y el dice de un tono gentil, cómo a ti te gusta escribir, te voy a dar ideas. Imagínate que tus amigos se fueron y yo no los conozco muy bien, ellos se fueron y te dejaron aquí con un completo extraño, pero yo podría ser un matón en serie que ha calculado todo para no dejar indicio. Podría tener un amigo con un coche y cuando sales del restaurante el podía secuestrarte, si a mí no me importara el futuro, podría matarte ésta misma noche para hacerlo bien debería poder revisar tu celular y ver si tu comunicación es con smiles o con palabras, pues todo es más sencillo con smiles porque si utilizaste textos es mucho más complicado porque hay pruebas de nuestro encuentro …
El objetivo es preguntarnos si queremos seguir dándole el poder a los hombres para asustarnos. Si debemos salir de casa en la noche acompañada o sola y si debemos seguir militando para recuperar el mundo , militar para recuperar su espacio y no dejarlos solos apropiarse de la oscuridad, de la noche que también es nuestra.